El cuidado de nuestras personas mayores es una cuestión delicada, que siempre nos gusta relegar a personas de confianza. Cuando nuestros seres queridos no se valen por sí mismos o padecen patologías que necesitan una atención completa, necesitan de manera continuada el apoyo de una persona en el hogar.
Las residencias se presentan en estas ocasiones como la solución para muchas familias que se encuentran ante esta situación y que desconocen otras alternativas de mejor calidad, como puede ser el contratar a una empleada interna. Decimos de mejor calidad, y queremos hacer hincapié en ello, porque efectivamente, si nuestros mayores cuentan con la capacidad suficiente, la gran mayoría prefieren vivir en su hogar, donde se sienten cómodos y seguros, en sus estancias de toda la vida. Cambios radicales como puede ser el traslado a una residencia pueden desorientarlos gravemente, y puede hacerlos sentir en ocasiones como “un estorbo”.
¿Cómo contratar a una interna?
Comentábamos que la contratación de una interna para personas mayores puede ser una alternativa en muchas ocasiones, pero que desgraciadamente, muchas familias desconocen. A la hora de contar con una empleada en régimen interno, debemos tener en cuenta las siguientes consideraciones básicas:
- Su selección. Es fundamental que ante la contratación de una interna, tengamos claro que es esa persona la que realmente es válida para el puesto y va a entenderse con tus familiares. No “metas” en tu hogar a una empleada sin ningún tipo de referencia, sin antes haber pasado una entrevista y en función del estado de tus mayores, sin su supervisión –aunque si en ocasiones, son muy reticentes o en función de su estado de salud, este paso no sería recomendable.
- Regularización. Recuerda que desde el año 2012, según la Ley de Empleados de Hogar, es obligatoria la regularización del empleado que desempeñe cualquier tipo de actividad en el hogar. Serán necesarios trámites en la Seguridad Social.
- Régimen Especial. Recuerda que además, las empleadas internas se someten a un régimen especial, con condiciones diferentes a las de las empleadas domésticas. Una de las peculiaridades que las diferencia es el número de horas en el hogar; en un régimen interno, la empleada pernocta en el hogar, pero mucho cuidado, porque frente a lo que muchos pueden llegar a pensar, las empleadas internas también tienen sus horas mínimas de festivo semanales.
Y ahora bien, teniendo en cuenta estas consideraciones, ¿cómo selecciono, regularizo y conozco la legalidad vigente en relación al Régimen Especial de Empleadas internas de hogar?
Muy fácil: en Interdomicilio tenemos tu solución. En la empresa de prestación de servicios para el hogar te ofrecemos una asistencia integral del proceso, para que no tengas que preocuparte por nada más. Ponemos a tu disposición nuestro servicio de selección de internas, a través del cual, podrás elegir a tu empleada, de entre tres candidatas que se adaptan al perfil buscado. De manera posterior, te asesoramos acerca de la legalidad vigente, salarios mínimos, tramos de cotización, pagos a la Seguridad Social… y si así lo deseas, puedes dejar en nuestras manos todo el tema de la regularización inicial de la trabajadora, e incluso la gestión de nóminas mensuales de manera posterior.
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