¿Cuándo llegas a tu casa esta te espera “patas arriba” y todas las tareas domésticas por hacer? ¿Debes atender también a tus mayores y prestarles atención de manera continuada aunque tu inflexible horario laboral apenas te deje tiempo para respirar? ¿Estás cansada de desarrollar día a día las funciones de tres trabajos diferentes y solo percibir remuneración por uno de ellos? En Interdomicilio tenemos la solución.
La patología desarrollada por los familiares, comúnmente hijas o cónyuges de una persona mayor que necesita atención constante, que es incapacitada o que sufre enfermedades mentales es tan común en la sociedad que ya tiene nombre: es el síndrome del cuidador. Cada día vivimos en una sociedad un poco más envejecida y las previsiones para un futuro más lejano no dejan lugar a dudas: la tendencia es inconfundible y marca una sociedad en la que las personas mayores compondrán el mayor porcentaje poblacional. Además, conforme la ciencia avanza, permite que los individuos sean cada vez más longevos aunque acogidos en muchas ocasiones a dependencias medicinales y necesidad de atención constante.
El cuidado de nuestros mayores supone pues algo fundamental que no debemos desatender. Son ellos los más proclives a sufrir enfermedades mentales, en su caso como consecuencia de la dificultad de afrontar la vejez o la insuficiencia. Ni falta hace nombrar los numerosos problemas que las enfermedades fisiológicas en concreto las degenerativas pueden acarrearles en el desarrollo de sus rutinas. Su asistencia se hace en este sentido esencial con el fin de apoyarlos diariamente, y con esto, nos referimos tanto a refuerzo en tareas de la vida cotidiana como a apoyo moral. Y es que la soledad continuada en personas mayores de los 40 años se reconoce ya como uno de los desencadenantes más potentes de patologías crónicas.
Nuestros ancianos requieren una atención periódica, pero nosotros también nos merecemos disfrutar de la vida desligándonos de las ataduras que este frenético mundo nos va imponiendo poco a poco. La solución para el problema que nos ocupa es muy sencilla: cuenta con los servicios que nuestros asistenciales domiciliarios te ofrecen para el cuidado de tus seres queridos. Recurre a la confianza que te proporciona la empresa líder de prestación de servicios a domicilio y deja atrás esa sensación de angustia constante por desatender parte del día a tus ancianos. No permitas que su compañía y su experiencia se convierta en una obligación diaria y disfruta de tus mayores como nunca de la mano de Interdomicilio.
Llámanos o acércate a tu oficina más cercana y te informaremos de todo aquello que podemos ofrecerte. El proceso de contratación es rápido, fácil y se ajusta siempre a tus necesidades.
